La que sigue, será la sinopsis de la novela en la contraportada del libro:
No es sencillo rastrear en el
tiempo el origen de los atentados o acciones de bandera falsa como arma
estratégica para legitimar el comienzo de ofensivas militares sobre un presunto
e injusto culpable. A pesar de ello, la historia demuestra su eficacia como
elemento de peso en la toma de decisiones geopolíticas de amplio alcance.
Tomando como ejemplo
paradigmático el ataque a las Torres Gemelas de Nueva York del 11 de septiembre
de 2001, esta trilogía propone al lector un viaje profundo y desgarrador, cuajado
de sorpresas, a lo largo de todas las historias e intrahistorias en torno a
este acontecimiento capital. Huyendo a toda costa de cualquier clase de
fabulación, conjetura o teoría conspiranoica, el autor, Francisco Casero Viana,
elabora un completo tour literario basado en sólidas fuentes documentales que,
a pesar de hallarse a libre disposición del público, parecen haber pasado
desapercibidas en favor de otros discursos de un carácter marcadamente más
sensacionalista. Parafraseando quizá a W. R. Hearst, parece cumplirse la máxima
«no dejes que la verdad te estropee una buena noticia». O, por decirlo de otra
manera: «no estamos preparados para la verdad». Cuando la verdad, de hecho, se
encuentra en la hemeroteca; en la documentación oficial del propio gobierno norteamericano,
llamando a gritos a quien, sin embargo, no es capaz de desviarse de la versión
de los hechos que los medios de comunicación han grabado a fuego en su mente.
Hearst sensacionalizó las atrocidades españolas en Cuba mientras pedía la
guerra en 1898 contra España. «Pongan ustedes las fotos, que yo pongo la
guerra», —les
decía a sus reporteros.
Alrededor de este interesantísimo y
esclarecedor corpus documental, el autor teje una urdimbre narrativa que atrapa
al lector, le instruye y le ofrece una nueva perspectiva sobre los hechos que
ya creía conocer. Página tras página, el lector recibe bofetadas de realidad
que echan por tierra sus débiles convicciones en referencia a los acontecimientos
que se relatan. De la mano de los personajes y las aventuras que viven y
sufren, se abre a ojos del lector una perspectiva nueva; una realidad
descarnada e incómoda, inquietante, que deja con ganas de saber más.
Algunos de los personajes,
nombres y acontecimientos que aparecen en esta trilogía son ficticios. Otros,
lamentablemente, no.
Espero que sea de vuestro agrado