Amigos lectores de la Historia
Después de muchos años dormidas en el “limbo” , ese lugar al
que llegan las novelas menos leídas en Amazon, tal vez porque no han despertado
la suficiente curiosidad en los lectores, aunque también “mea culpa” por no
haber sabido despertar en ese lector de novela Histórica –“con mayúsculas”–, el suficiente interés por
ellas, creo que ha llegado el momento de que les preste un poquito de atención
y os las vuelva a enseñar, aunque muchos de vosotros ya conocéis sus portadas.
Sí, me refiero a la trilogía Muyahidín, escrita hace ya
bastantes años, pero no por ello menos interesantes en cuanto a hechos
históricos.
También es cierto que no poseen el exotismo de las novelas
sobre el Imperio Romano, los Incas de Perú, las historias de Vikingos, o las
que relatan la vida en Egipto durante la época faraónica, pero lo que se relata
en ellas también es historia, aunque de nuestra época contemporánea, de la que
nos atañe a nosotros hasta nuestras fechas, y no me refiero a los años de la
Guerra civil española ni a la Segunda guerra mundial, porque lo que se relata
ha ocurrido entre los años 1930 y nuestros días. Sus consecuencias las sufrimos
en estos momentos e diferentes partes del mundo,
Me refiero a mis novelas Muyahidín, La ira de Alá y Bandera
Falsa -Terrorismo de Estado.
En esta ocasión solo os quiero hablar de ellas y haceros
unas preguntas:
¿Cuáles han sido las películas más vistas en los últimos
cincuenta años?:
Seguro que me responderéis , todas aquellas sobre la Segunda
guerra mundial y las del famoso espía del MI6 inglés, James Bond, ¿no es
cierto?
¿Y no despierta ningún interés en vosotros, como lectores,
la historia acaecida en el mundo con posterioridad a nuestra Guerra Civil
española?:
Sí, esa que nos atañe, sobre todo a los europeos por la
masiva llegada a nuestras costas de tantos miles de refugiados, huidos de sus
países de origen por las guerras crueles y fratricidas que los asolan. Con
todos mis respetos hacia ellos, las tres novelas relatan, desde el origen de
todos los males hasta sus nefastas consecuencias actuales. Pero también se da a
conocer a sus culpables, a los reales, a los gobiernos que, por su ambición
expansionista y dominadora de un mundo cada día más globalizado, deciden sobre
nuestras vidas como individuos, como ciudadanos de cualquier país del mundo, y
lo hacen con mentiras, ocultando sus verdaderos motivos y permitiendo que los
medios nos hagan llegar solo una parte ínfima de los hechos, tan sesgada y
distorsionada que para los ciudadanos pasa desapercibida, pero que modifica
nuestras vidas de tal forma que ya no somos libres.
¿Y qué será lo que nos pueda contar Francisco Casero, como
autor de unas novelas de ficción histórica?:
Pues, verdades, aunque muchísimas personas pensarán que solo
se trata de “una teoría conspiranoíca”, en cuyo caso, estaréis en vuestro
perfecto derecho de pensar como mejor creáis.
¿Pero pensaríais de la misma manera, si en todas mis novelas
citase la fuente de mis investigaciones?:
Seguro que algunos lectores no dudarían de los hechos
relatados en las novelas, otros sí que dudarían de la veracidad, y otros,
posiblemente una mayoría, dudaría totalmente porque sería del todo imposible
imaginar que tales hechos hayan podido ser ciertos. Y a todos esos lectores,
les diría que están en su derecho de pensar como mejor crean conveniente.
¿Pero cuál sería la reacción de esos lectores o posibles lectores,
si les dijese que mis investigaciones provienen de fuentes fidedignas que
pueden comprobar por ellos mismos después de leer cada novela?:
Yo os lo diré: estupefacción por la gravedad de los hechos y
la irresponsabilidad de los dirigentes de muchos países.
De uno de los hechos recientes más graves ocurridos en este
Siglo, y me refiero a la “demolición del Word Trade Center de Nueva York”, hace
tan solo 18 años, hay cientos de investigadores de prestigio internacional,
catedráticos de Universidades de prestigio mundial, políticos reputados
internacionalmente también, expertos en demoliciones, constructores de
rascacielos, expertos en el control de incendios y, muchos oficiales conocidos
y respetados cargos estadounidenses militares, agentes de los servicios de
inteligencia, veteranos de las fuerzas del orden público y los funcionarios del
gobierno Norteamericano, que han expresado una gran crítica al informe de la
Comisión 9/11 o han hecho declaraciones públicas que contradicen el informe. Varios
de ellos, incluso alegan complicidad del
gobierno en los terribles actos de 9/11.
Pero hay muchas más de 220 declaraciones de altos
funcionarios de la administración Norteamericana, y sus voces colectivas dan
credibilidad a la afirmación de que el informe de la Comisión 9/11 es
trágicamente errónea, por lo que estas personas no pueden ser simplemente
descartados como creyentes irresponsables en alguna teoría de conspiración del
9/11. Su preocupación sincera, respaldado por sus décadas de servicio a su
país, demuestran que la crítica del informe no es irresponsable, ilógica, ni
desleal per se. De hecho, puede ser todo lo contrario.
El general de división Albert Stubblebine, del ejército de
los EE.UU. (ret) –(Ex Comandante General de Inteligencia del Ejército de
Estados Unidos y del Comando de Seguridad durante el periodo de 1981 a 1984, al
mando de 15.000 agentes de inteligencia y de seguridad, así como jefe del
Comando de Investigación y Desarrollo Electrónico del Ejército de Estados
Unidos y de la Escuela de Inteligencia del Ejército de Estados Unidos y Centro.
También ex jefe de Interpretación de Imágenes de Ciencia y Técnica de
Inteligencia, con una carrera en el Ejército de 32 años. Dijo en un vídeo/entrevista
tomado el 28/06/2009:
––Soy el general de división Albert Stubblebine. Estoy
retirado como comandante general del Ejército. En mi última asignación, yo era
responsable de todas las fuerzas de inteligencia estratégica del Ejército en
todo el mundo. Tenía la responsabilidad de las señales de inteligencia, fotos
de inteligencia y contra inteligencia del ejército, la inteligencia humana.
Todos ellos estaban bajo mi mando en mi última asignación. … Se suponía que
debía averiguar lo que el enemigo estaba haciendo, antes de que el enemigo pudiera
hacer algo para tomar medidas contra él.
Eso es inteligencia antes del hecho. Por lo tanto, nunca
dependemos de un solo informe de datos antes de tomar una decisión, porque lo
mejor es saber exactamente lo que está pasando. … Así que he tenido mucha
experiencia mirando fotografías de muchas plataformas diferentes en muchos
países de todo el mundo.
––Entrevistador : OK.
Así el 11 de septiembre, en el año 2001, ¿que impactó el Pentágono? –
––General Stubblebine : No sé exactamente lo que dispara,
pero sí sé, desde las fotografías que he analizado y revisado con mucho cuidado,
que no fue un avión.
––Entrevistador : ¿Qué le hizo creer que no fuese un avión?
––general Stubblebine : Bueno, en primer lugar, si nos
fijamos en el agujero que se hizo en el Pentágono, si hubiese sido un avión el
morro debió penetró lo suficiente para que las marcas de las alas hubiesen
estado en las paredes del Pentágono. No he sido capaz de encontrar las marcas
de las alas. Entonces, ¿dónde estaban?¿Esta nave – vehículo, o lo que fuera –
tenía alas? Aparentemente no, porque si hubiera tenido alas, habrían hecho
marcas en el lado del Pentágono. A una persona contrarrestado mi teoría, y dijo:
“Oh, has entendido todo mal. Y la razón por la que está mal es que cuando el
avión se encontró, un ala inclinada hacia abajo y cayó al suelo y se rompió. ”
Le dije: “Está bien, eso es posible, un ala podría haber roto.” Pero si
entiendo correctamente, la mayoría de los aviones tienen dos alas. No he
conocido a un avión con una sola ala. Entonces, ¿dónde estaba la marca de la
segunda ala? OK, uno se interrumpió – que debería haber sido una marca para la
segunda ala. No he podido encontrar que en ninguna de las fotografías que he
analizado. Ahora he sido muy cuidadoso para no decir lo que pasó allí. ¿Por
qué? Debido a que usted no tiene esas pruebas. … Lo hice – Nunca he creído que
se trataba de un avión, ya que he analizado las fotografías y no he encontrado
resto del avión. Y la prensa está diciendo lo que les han dicho que tiene que
decir acerca de esto. Ahora, tengo pruebas de eso? No. Pero creo que lo que se está
diciendo, las historias que se cuentan acerca de 9/11 son falsas. Es decir, se
echa un vistazo a los edificios que caían. Ellos no caen porque los aviones les
pegan. Ellos cayeron debido explotó una bomba en su interior. Demolición. Mira
el edificio 7, por el amor de Dios. No cayó a su lado. No cayó a esta dirección
o en esa dirección; al igual que las dos torres. …Cuando nos fijamos en las
temperaturas que se pueden crear con combustible en un tanque de gas o de un
depósito de combustible de un avión, y luego investigar la cantidad de calor
que se requiere para fundir la superestructura de los edificios que se vino
abajo, cuando se pone todo eso en conjunto, la única cosa que muestra es que no
coincide con los hechos. ¿Qué es lo que no quieren que el público sepa?
Http://www.youtube.com/watch?v=daNr_TrBw6E
––Ese es uno de los miles de testimonios en un caso trágico
que costó la vida de más de 5000 personas en un momento concreto de un hecho
concreto, ¿pero cuáles fueron las razones? ¿Hay más casos semejantes?
––Claro que los hay. Ocurridos en diferentes lugares del
mundo y contrastados. Doy pelos y señales en cada una de mis novelas, aunque
quiero aclarar una cuestión importantísima: Comencé a escribir a partir del 7
de agosto de 1998, cando leí en los periódicos el brutal atentado contra dos de
las embajadas norteamericanas en Kenia y Tanzania, al parecer, ejecutada por
una organización terrorista de origen musulmán, llamada AlQaeda, y dirigida por
un multimillonario saudí llamado Osama bin Laden.
Comencé por recortar y guardar toda la información que
aparecía en prensa, escuchaba noticias y me hacía una pregunta: ¿Cómo es
posible que un millonario saudí se meta a terrorista?
Fui a hemerotecas, entraba en Internet buscando información
sobre el individuo en cuestión y, con el tiempo, tirando del hilo se fue
desenrollando la madeja hasta dar lugar a las tres novelas de la trilogía.
Pero quiero aclarar otra cuestión no menos importante: No se
trata de información periodística solamente, son novelas con personajes de
ficción donde el suspense, la intriga, la acción, la amistad y el amor tienen
lugar. Novelas con una buena trama, dentro del relato de los hechos históricos,
que no dejará insatisfecho a nadie, sea lector de ficción histórica, aventuras
o romántica.
Solo espero que estas páginas puedan servir para despertar
vuestro interés por ellas. Por último, deciros que esa misma trilogía la he
refundido en un solo volumen para que al lector le sea más económico y factible
poder tener los tres libros en uno solo porque son complementarios entre sí, y
que lleva el título de CASUS BELLI – BANDERA FALSA – 1898-2010.
relinks.me/1091402981
Gracias por la atención que me habéis prestado